La Evocación Draconiana

En lo que respecta a la evocación, la gente suele tener muchas «fantasías» con respecto al tema. El mago inexperto piensa que recitando algunas palabras de un antiguo grimorio medieval el espíritu aparecerá y cumplirá con todas sus peticiones, pues no, esto no funciona de este modo.

Dentro de todas las ramas de la magia, la evocación es sin lugar a dudas una de las más complejas de aprender. Y esto es porque para poder hacer una evocación y tener resultados decentes hay que tener una buena visión astral. Los espíritus, demonios o entidades en general, siempre escuchan nuestro llamado, de hecho ya saben porque son llamadas. No es necesario amenazarlas, insultarlas ni mucho menos. El hecho concreto es que uno siempre que aborda cualquier trabajo mágico debe de hacerlo con respeto, respeto no es miedo, los dioses, demonios y espíritus del sendero draconiano son nuestros aliados, no son nuestros esclavos, uno tiene que respetar el hecho de que estos seres son primigenios, mucho más antiguos que nosotros y se les debe respeto como le debemos respeto a nuestros mayores. Siempre y cuando el espíritu quiere ayudarnos, lo hará o podemos llegar a un trato y así conseguiremos lo que queremos.

Lo primero que tenemos que sacarnos de la mente es que la evocación es compleja (en cuanto a elementos rituales), pero que a su mismo tiempo con practica, tiempo y paciencia lo podremos conseguir. Tenemos que tener una visión realista sobre el tema, si esperamos que después de un ritual de evocación el espíritu aparezca ante nuestros ojos físicos de forma material, esto no sucederá, los espíritus necesitan de un medio material para poder manifestarse, no tiene la densidad de la materia, por lo que no podrá simplemente aparecer y ya. Esta es la razón por la que debemos tener una buena visión astral desarrollada. Lo ideal para la evocación es contar con un espejo mágico, el espejo será un portal al Otro Lado, una ventana con la que podremos ver hacía el más allá pero también nos podrán ver del Otro Lado. Otra opción interesante a la hora de una evocación es el uso del agua, un cueco negro lleno de agua es un buena medio para entrar en contacto. El agua de por sí es un portal hacia el plano astral. Cuando hayamos avanzado en esto, podremos usar otros medios, como el humo (se requiere de una cantidad considerable) o el fuego. Otros elementos a tener en cuanta son la oscuridad, una habitación en penumbras ayuda mucho, la tranquilidad de la noche, la fases de la luna, cuando la luna tiene más poder (luna llena y luna nueva) son momentos ideales para todo lo relacionado con las practicas mágicas, también podremos tomar en cuenta las fechas mágicas en el año, los equinoccios, solsticios, etc.

Ahora bien, el mago draconiano, no emplea círculos mágicos, triángulos o elementos similares, el contacto es directo con el espíritu a ser evocado, esto es simple, no somos magos ceremoniales, esto ya es otro tema y hay muchos tratados que hablan sobre el tema. Por el otro lado si empleamos un círculo mágico, no lo hacemos con la función de que nos proteja, ¿necesitamos protección de nuestros aliados y maestros espirituales?

El uso de la sangre suele ser muy útil en estas prácticas, una pequeño sacrificio de sangre sobre el sello ayuda a abrir las puertas al otro lado, el sacrificio también es una muestra de devoción.

El uso del nombre del espíritu a modo de mantra, ayuda mucho en estas prácticas, también podremos realizar un llamado, lo podremos escribir nosotros, no tiene que ser algo acartonado, tiene que ser claro y con sentido para nosotros. El uso de mantras especiales como la palabra «Lepaca» o » Zazas zazas nasatanada zazas » suelen ser muy poderosos para abrir las puertas al Otro Lado.

Una vez que hayamos entrado en contacto con el espíritu, podremos hacerle una petición o aprender de él. Requiere de bastante tiempo poder ver algo en el espejo, pero la manifestación se puede dar de muchos modos diferentes, nos puede surgir una idea que no es nuestra, algunos magos mantienen grandes charlas telepáticas con el espíritu y otros tienen algunas intuiciones. También y luego de la práctica, podremos colocar el sigilo del espíritu debajo de la almohada y mandarle un mensaje telepáticamente como para que entre en nuestros sueños.

A modo de conclusión, la práctica de la evocación es ardua, hay muchos métodos, formas y sistemas, la practica hace al maestro y con el paso del tiempo podremos descubrir nuevas formas de contacto con el Otro Lado.

Daemon Barzai

 

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